
¿Y si no fueras como crees ser?
¿Y si no fueras lo que crees?
Que tal te hayas construido una historia de ti mismo hace muchos años basada en ilusiones provenientes del miedo? Una historia que tiene como base creencias del ego, que nos llenan de inseguridades y nos convencen que no somos suficientes o que no somos dignos de amor? Aquellas creencias que te dicen que si no eres perfecto nadie te querrá, o que si no tienes éxito no serás “nadie en la vida”, o que si no tienes una buena imagen, dinero, casa, carro y beca no vales nada?
¿Que tal te hayas creído ese cuento?
Pues sabes, hace sentido que si te creíste eso de ti, necesites vehementemente ser el mejor y destruir cualqueir persona o cosa que pueda ser una amenaza a eso, no porque seas malo, no porque estés loco, si no porque una parte de ti te hace creer que si no lo haces, mueres -mueres a la versión que construiste de ti, donde vales por lo que tienes y lo “grandioso” que eres- pues como te edificaste a ti mismo a partir de esa creencia, si ella no se cumple, quien eres? Nada ni nadie?
Si tú fueras a morir, no te agarrarías con fuerza de lo único que crees que te puede salvar? No lucharías vehementemente por tener ese lugar donde vales algo y eres amado?
Seguramente si.
Es lo normal, pues en el fondo, aunque no lo aceptemos, todos queremos pertenecer, sentirnos valiosos y amados por quienes somos. El rollo es que nos da vergüenza aceptarlo, creemos que nos hace débiles reconocerlo… Así que intentamos buscar otras formas quizás un poco torpes para lograrlo, sin saber que ellas, a largo plazo, lo único que harán es alejarnos de lo que realmente somos y acercarnos a lo que más tememos, a lo que fueron diseñadas para evitar: la soledad, el desamor , el rechazo, la inseguridad o el éxito sin sentido que se torna en vacío.
Así que, desconociendo esto, con el gran deseo de ser alguien, te agarras con fiereza a lo que crees ser tu salvación: crees que si compites con los otros ganarás y serás exitoso, ¡por fin valerás!, o que si escalas en la jerarquía social, buscas obtener millones y millones… y/o arrancas la travesía de pulir tu cuerpo a la imagen y semejanza de una escultura de porcelana, lograrás ser amado, admirado o aceptado…….
Pero hay una falla en el cálculo de tu cabeza….
Todo eso funciona si crees en la fórmula base: “solo valgo por lo que tengo” traducida en ejemplos como: “si no soy el mejor = no voy a ser amado” o “si no soy perfecto = no voy a ser amado.
¿Pero si la fórmula de base no fuese correcta?
Si los cimientos de tu estructura estuviesen sobre un suelo poco sólido y veraz?
Quizás y cambiarías toda la historia que has construido de ti, del mundo y de los demás. 
Y esto da mucho miedo, implicaría romper con muchas cosas y navegar en la incertidumbre.
Se requiere de mucho coraje para reescribir la historia, para elegir una narrativa propia, los mundos que quisieras conocer y los personajes con los que quieres estar.
Vivir la propia vida es una hazaña de valentía.
¿Te atreverías?
MV.