En esta travesía de la vida he tenido más de una ruptura, caminos llenos de dragones, obstáculos, sombras y dificultades; transiciones y crisis que me han permitido hoy existir, me han forjado y transformado en lo que estoy siendo y me han abierto las puertas para devenir en todo lo que puedo ser.
Tengo la certeza que es gracias a nuestra vulnerabilidad que podemos conectarnos con lo que somos para convertirnos en nuestra Mejor Versión, aquella versión de nosotros que es libre, auténtica y genuina, que tiene el coraje de ser dueña de sí misma y de su propia vida.
Para vivir en libertad se necesita de una gran dosis de valentía, y les afirmo que nadie es más valiente que aquel que lo hace temblando de miedo.
Así que creo profundamente en el ser humano, en toda su manifestación. Creo en el sutil y potente equilibrio entre el arte y la ciencia, la razón y la emoción, el intelecto, el cuerpo y la intuición; el humor, la mística y el amor.
